Optimice la ventilación con un funcionamiento controlado en función de la demanda. El aire fresco se suministra solo cuando es necesario en función de los niveles de CO2.
Mantenga el CO2 interior en el rango ideal de menos de 1000 ppm para mantener el bienestar de los ocupantes.
Cumpla fácilmente las normas IAQ de las certificaciones WELL, RESET, LEED y Fitwel, que recompensan el seguimiento continuo de la calidad del aire y el cumplimiento de los umbrales.
Diseñado para una rápida integración en sistemas de gestión de edificios (BMS) y controles HVAC, el sensor admite protocolos estándar (por ejemplo, MQTT, Modbus, BACnet Gateway) y salidas analógicas para facilitar la conexión.
Los integradores de instalaciones pueden conectar el dispositivo a los controladores existentes mediante conexiones Wi-Fi, Ethernet o RS-485. Se puede acceder a los datos en un panel de control en la nube o en su propia plataforma a través de una API abierta.
El sensor de CO2 montado en la pared mide continuamente los niveles de dióxido de carbono en la habitación. Cuando aumenta la ocupación y el CO2 empieza a acercarse a un umbral preestablecido (por ejemplo, 800 ppm), el sensor avisa al sistema de ventilación. Si los niveles de CO2 se mantienen bajos, el sensor reducirá la ventilación. Este ajuste dinámico garantiza un flujo de aire óptimo.